Manuel Moreira dijo que su hijo había salido de su casa en la calle 20 de Julio de la parroquia San Pablo con dirección al colegio Portoviejo, donde estudiaba en el octavo año de básica, y minutos después lo llamaron para comunicarle que lo habían hospitalizado.

“Lo poco que pudimos conocer es que a eso de las 13h30 estaba en la hora de educación física y que al parecer se guindó del arco de una de las canchas del colegio y se cayó golpeándose en la cabeza”, manifestó. 

Agregó que cuando entró al hospital a ver el cuerpo de su hijo, se dio cuenta de que tenía un golpe en la frente y una herida atrás de la cabeza.

Atención. En el hospital Verdi Cevallos, los médicos detallaron que cuando el menor de edad llegó a dicha casa de salud ya no tenía signos vitales.

Al hospital también llegaron miembros de la Policía Judicial para conocer sobre lo que había acontecido y entrevistaron a varias personas que laboran en el colegio, quienes acompañaron al niño desde la unidad educativa hasta el nosocomio.

El personal del plantel evitó dialogar con la prensa y refirieron que solamente las autoridades del colegio estaban autorizadas para hablar del tema.

Miembros de Criminalística y de la Fiscalía realizaron el levantamiento del cadáver del menor de edad y luego el cuerpo fue trasladado en compañía de uno de sus familiares al centro forense de Manta para que se le realizara la autopsia.

En las afueras del área de emergencias se aglomeraron decenas de personas entre conocidos y familiares del niño fallecido, quienes pedían verlo, antes de que la Policía se lo llevara a Manta, pero los agentes detallaron que no estaba permitido.

Temor. Al conocerse la noticia de la muerte de un estudiante en el colegio Portoviejo, varios padres de familia acudieron a las instalaciones de la institución educativa para retirar a sus hijos, sin conocer exactamente lo que había ocurrido.

La insistencia de los representantes fue tanta que aproximadamente a las 16h00 una de las puertas laterales del colegio fue abierta y se permitió el ingreso de los padres.

En el interior del colegio ya había personal del Ministerio de Educación coordinando la salida de los estudiantes.

ESPERA. Un equipo de El Diario trató de obtener la versión del rector del colegio Portoviejo sobre lo acontecido, pero el personal del lugar detalló que se encontraba en una reunión donde se estaba tratando el caso de la muerte del estudiante y no era posible que diera una entrevista.

Personal del Ministerio de Educación explicó que la entidad no emitirá ningún pronunciamiento hasta tener un informe sobre lo ocurrido.