Indicaba que parte de tal remediación es ordenar a Finanzas entregar a nuestro Gobierno Provincial los 420 millones de dólares que se le ha dejado de transferir para el desarrollo productivo de las zonas rurales de la provincia en estos seis años como consecuencia de un mal cálculo, tal vez mal intencionado. Recursos que vendrían muy bien a los campos de nuestros 22 cantones representados en la Corporación Provincial y sus miembros el Señor Prefecto, Sra. vice Prefecta, los Alcaldes y representantes de los Gobiernos Parroquiales. Finalmente solicitaba se remedie ésta desigualdad, puesto que la misma acrecienta cada día más las insultantes asimetrías socioeconómicas entre territorios ecuatorianos.

Es que se trata de 70 millones menos por año en transferencias a nuestra prefectura, contrastado con los recursos asignados a las prefecturas de Guayas y Pichincha, porque al Ministerio de Finanzas se le ocurrió en el cálculo seguir incluyendo a las poblaciones URBANAS de Guayaquil y Quito.

El Presidente debe intervenir. 

Rafael Correa ha calificado a Manabí como “La provincia del milenio” en tal sentido debe actuar en consecuencia y con la celeridad que amerita el caso, corregir éste atentado al desarrollo de Manabí. 

Y si el primer mandatario fuese aun más justo en el tratamiento, debería comparar para lograr equidad distributiva y retributiva en el cálculo, no solo a nuestra población rural, sino también variables como territorio, necesidades insatisfechas, dispersión poblacional, vocación y aportación agrícola, pecuaria, pesquera, turística entre otras tantas diferencias que a la vez resultan ser ventajas comparativas a favor nuestro como territorio. 

Y allí si, al imprimir justicia a la primera provincia agro productiva del Ecuador, hacer de Manabí no un enunciado lirico repetido por doquier y por cuanto funcionario público y actor político de gobierno se atreve a repetir cual cliché presidencial “La provincia del milenio”, sino un verdadero Manabí del milenio, un verdadero emporio de desarrollo, productividad, progreso y bienestar de sus poblaciones, para ya no seguir repitiendo la pregunta “Presidente y los 420millones? Presidente, y la provincia del milenio?”