La ilusión de pasar a octavos de final del Mundial de Fútbol se siente en la mayoría de los ecuatorianos, tras el triunfo del conjunto tricolor ante los hondureños 2-1 este viernes en el estadio Arena da Baixada de Curitiba. 

 

La afición ecuatoriana se concentró en diversos lugares para apreciar el partido que literalmente paralizó el país. 

Los colores amarillo, azul y rojo eran predominantes en la gente en muchos lugares, que explotaba de esperanza ante los dos goles que marcó Enner Valencia ante la selección de Honduras, que empezó ganando el encuentro.  

Gritos de emoción por parte de la afición al finalizar el encuentro dejó en claro las posibilidades que aún tiene la Tricolor en la cita ecuménica y ponen a muchos a sacar cuentas con la idea de lograr pasar a la siguiente fase, como sucedió en Alemania 2006.