Sobre la controvertida reforma de la ley del aborto que prepara el Gobierno me gustaría que en el anteproyecto de ley se reflejara que un niño en el seno de la madre con deficiencias no es intercambiable con la negociación política, espero que el PP sea valiente y apueste realmente por la vida.
Por la vida, con todas sus consecuencias. El aborto no es un tema de despacho. La clase política debe entender que no puede hacer de esta cuestión un arma arrojadiza de controversia electoral sino el cómo debe ayudar a esas personas. Esto debe ir acompañado de políticas sociales, de conciliación con el trabajo. La maternidad no es algo por lo que haya que dar el pésame.