La reconstrucción de esta vía fue contratada el año pasado y paralizada en febrero. Los trabajos quedaron a nivel de sub base.
El restaurante Mamá Inés, una boutique, un bar y una despensa fueron negocios que entre mediados de 2013 e inicios de este año se trasladaron a otros sitios de la ciudad, porque las polvaredas se había convertido en una competencia desleal, señaló Mirtha Vásquez, moradora de la ciudadela Barbasquillo.
Y es que no solo los negocios sufren por el polvo, también la salud de quienes habitamos a lo largo de este tramo de vía. La gripe y la faringitis se han hecho crónicas, agregó Vásquez. “Vivir aquí es terrible, si no es el lodo en invierno es el polvo en el verano”, indicó Olmedo Llerena, comerciante del lugar. Él dijo que el municipio en la mañana riega agua con un tanquero en los 600 metros que recorre este tramo, pero luego de las 11h00 la polvareda regresa.
compromiso. La reconstrucción de este tramo de vía se reclama hace más de cuatro años y recién en los últimos meses de 2013 fue contratada la obra que después de las elecciones del 23 de febrero fue paralizada por falta de pago, dijo Walther Villao, director municipal de Obras Públicas.
Él manifestó que se han comprometido con los habitantes del sector a definir la continuación de esta obra en un plazo de 20 días, previo una consulta jurídica que recomendará la terminación del actual contrato o seguir los trabajos con el mismo contratista.
Villao explicó que para lograr el financiamiento, el sector afectado será declarado en emergencia.