Patiño explicó en una conferencia de prensa en Quito algunas de las resoluciones adoptadas durante la asamblea general de la OEA celebrada la pasada semana en Asunción (Paraguay) y consideró el ofrecimiento de esos países positivo en el contexto de la reforma del Sistema Interamericano de Derechos Humanos que impulsa Ecuador.

El gobierno quiere que Washington deje de ser la sede de la CIDH, al no haber ratificado Estados Unidos el Pacto de San José (fundamento del sistema interamericano) y así lo propuso en la asamblea de Asunción, pero el planteamiento no fue acogido porque, según Patiño, "todavía no ha habido consenso para que (la sede) esté en otro Estado".

El canciller destacó, no obstante, el ofrecimiento que por primera vez ha hecho un jefe de Estado, el presidente haitiano, Michel Martelly, para que su país sea sede de la CIDH.

Patiño también subrayó que en Asunción se decidió establecer un diálogo sobre las relatorías de la CIDH que incluiría propuestas para su "financiamiento adecuado" e incluso la posible creación de un fondo para la recepción de contribuciones voluntarias para ello.

Ecuador sostiene que existen relatorías que gozan de un trato más ventajoso que otras, entre ellas la de libertad de expresión que, en ocasiones, ha criticado medidas adoptadas en Ecuador contra periodistas y opositores al Gobierno de Rafael Correa.

"El sistema de relatorías se tiene que reformar", dijo el ministro, quien lo calificó de "anárquico, incompleto y discriminatorio, porque hay relatorías que valen más que otras".

El canciller resaltó también otros acuerdos adoptados durante la Asamblea, uno de defensa de la privacidad de las comunicaciones entre los ciudadanos y entre los gobiernos y dos a propuesta de Ecuador, uno para rechazar la tortura y penas crueles, inhumanos o degradantes y otro para declarar América "zona de paz, cooperación y solución pacífica de controversias". EFE