“La meditación implica un permitir, un dejar pasar, una capacidad progresiva para renunciar a la tensión física y mental” explica Cevallos.

El especialista comenta que la meditación reeduca el cuerpo, eliminando los malos hábitos de la tensión física y los sobreesfuerzos innecesarios. “En efecto, el meditador está en armonía con su cuerpo, hasta el punto de percibir la tensión y relajarla”, detalla.

 sus beneficios. La práctica de la meditación tiene unos efectos fisiológicos muy concretos en el organismo, que además han sido demostrados por la ciencia, lo cual siempre parece dar cierta seguridad en la civilización comenta el psicólogo. Él dice que la meditación potencia la salud mental y física, además aumenta el cociente intelectual y ayuda al desarrollo de la inteligencia emocional y la empatía.

Génesis Vargas, psicóloga, comenta además que la meditación ayuda a mejorar la memoria, alivia el estrés, la ansiedad y la depresión.

“Cuando una persona tiene como hábito meditar, relajarse y respirar también reduce la presión sanguínea de su cuerpo y aunque parezaca increible aumenta su felicidad” detalla. 

Cómo meditar. El primer paso es encontrar un lugar tranquilo. Luego eligir un buen momento para meditar, por lo general el momento ideal es temprano en la mañana y en las horas antes de dormir. Después se debe elegir la posición más cómoda, y luego empezar a hacerlo cerrando los ojos e inhalando aire puro lentamente.