Esta es la principal conclusión de un estudio dado a conocer en la 50 reunión de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO), según el cual el 43 % de los pacientes que participaron en el trabajo vieron reducido el tamaño de sus tumores.
Se trata de una terapia dirigida y un avance en inmunoterapia, tratamiento de enfermedades mediante la potenciación o debilitamiento de los mecanismos inmunitarios.
En concreto, los investigadores, de centros de EEUU, Francia y España, usaron un fármaco -un anticuerpo monoclonal- en investigación diseñado para bloquear una proteína llamada PD-L1.
De un total de 68 pacientes se seleccionaron para este estudio 30, que previamente habían recibido tratamiento estándar y cuyos tumores habían sido caracterizados como positivos para PD-L1 (que tienen alterada esa proteína).
El trabajo se encuentra en fase I, primeros ensayos con pacientes en los que se mide, entre otros, la tasa de respuesta y la seguridad del fármaco, en este caso propiedad de Roche.
Las células tumorales son capaces de evadir el sistema inmune y lo hacen de múltiples maneras.
Cada tipo de impedimento que pone la célula tumoral al sistema inmune se llama punto de control.