Reporta la prensa argentina que medios y fanáticos se acercaron a la entrada del Registro Civil de San Isidro para recibir a la pareja, la cual a su salida fue homenajeada con tapitas de gaseosa, por la publicidad que firmaron juntos para Pepsi. 

 

El acto fue tan íntimo que apenas solo 12 personas asistieron al evento. Pero la polémica creció tras saberse que entre los invitados no estuvo el padre de Wanda, Andrés, ya que pretendía evitar situaciones incómodas con su exesposa, Nora, de quien hace poco se divorció. La boda llegó justo después de la controversia que generó ella al presentar una demanda a su expareja Maxi López, que no podrá ver a sus hijos.