El volumen, comisionado por el jesuita, escritor y teólogo italiano Antonio Spadaro y editado por Rizzoli, recopila los sermones ofrecidos por el obispo de Roma en esa capilla, adyacente a la Basílica de San Pedro de la Ciudad del Vaticano, desde el 25 de marzo de 2013 hasta el 20 de marzo de 2014.
El prólogo está escrito por el portavoz de la Santa Sede, Federico Lombardi, quien destaca la sobriedad y la intensidad de las misas de Bergoglio.
"Su ánimo sacerdotal y pastoral se manifiesta en su relación diaria con los fieles en una celebración eucarística y comunitaria, intensa, recogida y sobria, y en cierto sentido austera", afirma el también director del Centro Televisivo Vaticano y de Radio Vaticano.
Lombardi reconoce que siempre que ha sido preguntado por los periodistas sobre cómo es el pontificado de Jorge Bergoglio se ha referido "inmediatamente" a estas misas porque, confiesa, es donde se aprecia el carácter del papa.
"Como dice Francisco en su exhortación apostólica 'Evangelli gaudium', el modo de hacer las homilías dice mucho de la calidad interior y apostólica de un sacerdote, y esto sigue siendo válido incluso para cuando ese sacerdote se convierte en papa", afirma este sacerdote jesuita.