Actualmente los matarifes o expendedores de carne están faenando las reses en el camal de la parroquia Campozano, que ha colapsado y que además no reúne las condiciones higiénicas necesarias para brindar un servicio acorde a las exigencias de Agrocalidad.

 

ANTECEDENTES. En mayo del año pasado funcionarios de Agrocalidad clausuraron el lugar debido a sus pésimas condiciones y desde esa fecha los matarifes han tenido que asumir el gasto extra de movilizarse hasta la parroquia vecina, eso aunque el camal de Paján ya recibió las adecuaciones que necesitaba, dijo Rey Acuña, secretario de la Asociación de abastecedores de Carne en Paján.

El dirigente indicó que se ha contactado con el director de Obras Públicas municipal, Fabricio Macías, para que habiliten el camal, pero que recibe de respuesta que eso es decisión del alcalde Natahel Morán y que seguramente quedará para las nuevas autoridades que lleguen al municipio.

Actualmente la asociación cuenta con 47 socios y ellos pagan 5 dólares de tasa municipal por el desposte de cada res. Acuña agregó que sólo falta la presencia de un técnico especializado para darle funcionalidad al camal, ya que los equipos están allí; es falta de gestión y decisión de las autoridades, dijo

Los matarifes señalaron que también es necesario un transformador eléctrico adecuado para poder abastecer de energía a la cámara de  frío que tiene el nuevo camal.