Desde  septiembre del 2013, en que la Policía Especializada para Niños, Niñas y Adolescentes (Dinapen) llegó a El Carmen ya han logrado resolver varios casos.  

A finales de ese mes, cuando los policías de la UPC de Santa María (Zona La Manga del Cura de El Carmen) ingresaron a un  prostíbulo del lugar para revisar las condiciones en las que estaba funcionando, descubrieron a una menor de 14 años, oriunda de Quevedo, quien les confesó que estaba en el lugar en contra de  su voluntad.

La adolescente se encuentra desde entonces en un centro especializado, mientras que C.A.B.C. y J.J.M.M., propietarios del nigth club, fueron procesados por el delito de trata de personas.

A mediados de diciembre la Dinapen también  rescató a dos menores de 14 y 15 años, que meses atrás fueron raptadas en El Carmen y sometidas a la prostitución en Guayaquil por parte de los hermanos Roberto y José Q. A., quienes también están siendo procesados por el delito de trata de blancas; mientras tanto las menores recuperadas pasaron por un proceso de tratamiento psicológico y ya fueron devueltas a sus hogares.

La última localización de adolescentes en un prostíbulo de El Carmen se produjo el pasado sábado 12 de abril, en la parroquia San Pedro de Suma;  se trata de dos mujeres de 16 y 17 años, oriundas de El Carmen y Santo Domingo, mientras las autoridades judiciales dictaron prisión preventiva en contra del administrador del local, Xavier M. M. y de Marlon V. R., acusado de tener sometida a una de ellas. 

 

prevención. Según los agentes de la Dinapen, los padres deben tener cuidado con las personas con las que andan sus hijos, ya que en muchos de los casos hay hombres que se aprovechan de la ingenuidad de las menores ofreciéndoles dinero y muchos beneficios, cuando en realidad lo que buscan es que abandonen sus hogares para lanzarlas a la prostitución.

Santiago Licto, encargado de la Dinapen en El Carmen, indica que los casos citados demuestra el peligro por el que constantemente corren las adolescentes, cuyos hogares son inestables, al tiempo de pedir a los padres que no duden en confiar en la institución policial y denuncien los casos, apenas tengan una sospecha.