Pablo Aguirre, jefe de la Policía de Manta, confirmó que la menor no sólo habría sido raptada sino hasta violada por uno de los detenidos. 

La adolescente fue secuestrada cuando se encontraba en la casa de sus padres ubicada en el cantón El Carmen y la tenían escondida en varios puntos de Manta y Jaramijó. 

El coronel dijo que los detenidos aseguran ser inocentes y que la menor no estuvo secuestrada simplemente se había ido de la casa de sus padres porque había formado un hogar con el adolescente detenido.

“Aquella versión tendrá que ser investigada, pero más allá de aquello, en este caso hay concurrencia de delitos. Los detenidos serán investigado por el rapto y el abuso sexual al que fue sometida la menor” agregó el oficial.

Estos delitos son sanciones con 6 a 25 años de reclusión.