¡Qué maravillosa es la auténtica democracia! ¡No existe democracia, sin discrepancia! ¡Si hasta da gusto discrepar… donde se puede discrepar, no! Siempre y cuando los que pensamos distinto a las líneas trazadas desde arriba, no le caigan a uno encima sabatinas, cadenas y juicios (en el mejor de los casos). O balas, gases y cárcel (en el peor de los casos). 

¿Necesito ser más explícito? ¿Es necesario señalar ubicaciones geográficas con un puntero sobre el mapa? No lo creo: vosotros sois suficientemente inteligentes y bien informados para entender y comprender lo que intento deciros en esta nota. Por algo será que pensadores destacados (como Vargas Llosa, Premio Nobel de Literatura) sostiene: “… quienes acostumbran a leer editoriales y artículos de opinión, son seres superiores, sabios en sus respectivos niveles intelectuales que se nutren de conocimientos por estos medios (refiriéndose a la prensa) para caminar por la vida con menos riesgos de equivocarse al momento de tomar decisiones importantes…” o de elegir (agrego yo).

Comenzaré de arriba pa’ bajo: el caso de la reelección del Prefecto (Mariano Zambrano). Para mí, no fue ninguna novedad la avalancha de votos a su favor: 420.000 (en números redondos). 

¿A qué de debe la aceptación popular de este exitoso empresario-político en el ámbito electoral manabita? La respuesta es facilita: A su sencillez, como ser humano, que no olvida sus orígenes. A su dedicación, a tiempo completo, para atender y solucionar todos los problemas inherentes a las funciones que le competen. 

Y, de manera especial, a que ha sabido practicar con excelencia el término ¡unámonos! para lograr los objetivos y metas destinados al desarrollo de Manabí… sin entrar en consideraciones ideológicas, tal la alianza estratégica entre AP (gobiernista) y Unidad Primero que salió fortalecida en los últimos comicios.

En cuanto a las alcaldías (también de Manabí), no faltan comentarios: “¡Perdió el Gobierno!”. Negativo. El Gobierno ganó. Veamos: De las 22 alcaldías, las gobiernistas son 17, de las cuales, 7 corresponden exclusivamente a la alianza PAIS-UP, 7 a Avanza y 3 al Partido Socialista (estos dos últimos partidos: ramas del mismo tronco PAIS).

Pero (el infaltable), como todo es relativo, hubo casos específicos en donde el poder de la alianza no funcionó. ¿Por qué, ah? 

Dejemos que opinen también los politólogos.