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¿Top secret portuario? (II)
¿Top secret portuario? (II)
Por: Pedro Vincent Bowen
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Domingo 16 Marzo 2014 | 04:00

Antes de iniciar esta nota, estuve en meditación profunda, practicando lo poco de Hatha Yoga que aprendí del maestro ruso Pavel Gaysenyuk en los tiempos libres que me permitía mi trabajo en El Comercio de Quito cuando tuve a cargo la reingeniería de las 44 corresponsalías que tiene este medio en Ecuador.

¿Cuál mi objetivo de aquel extraño (para algunos) ejercicio?, os estaréis preguntando.
Respondo: Es que debía sentarme (tal estoy) frente al teclado de la compu a borronear el capítulo II del ¿Top Sicret Portuario?, debidamente relajado, calmado, poniendo mis emociones bajo el absoluto control de mi mente.
La finalidad: tomar en buen sentido las declaraciones de mi amigo Robert, el Batman del “Dúo Dinámico” de APM, a mi bella colega Anita Cevallos:  “… critica al articulista Pedro Vincent Bowen por dar a entender que tiene gente infiltrada que le suelta información confidencial…” (El Diario, marzo 13/2014).
Antes de continuar, permitidme recordar lo que dice la Constitución de Montecristi (art. 18): “Todas las personas tienen derecho a:
l.- Buscar, recibir, intercambiar, producir y difundir información veraz, verificada, oportuna, contextualizada, plural, sin censura previa acerca de los hechos, acontecimientos y procesos de interés general...
2.- Acceder libremente a la información generada en entidades públicas… No existirá reserva de información, excepto en los casos expresamente establecidos en la Ley…”. ¡Está clarito, nó!
Pero (el infaltable), como me fue imposible tener acceso a información directa sobre la identidad de las tres empresas concursantes en la concesión del Puerto (pese a insistentes intentos, incluyendo mi llamada fallida al celular del máximo de Portuaria), tuve que recurrir a una fuente confiable en instancias ministeriales, descrita por mí (sólo por jodienda, confieso) como “un pana que tengo camuflado como informante”.
Llegado a este punto, cabe preguntar con calma y sosiego, sin ánimo de polemizar y con todo respeto hacia quienes no concuerden con nuestro constitucional derecho de buscar, recibir y difundir información sobre hechos, acontecimientos y procesos de interés público: ¿Afecta al proceso de concesión que se conozca los nombres de los participantes en el concurso? ¿Somos acaso tan ingenuos para creer que en el mundo portuario-naviero, se ignora quienes son? Más aún: ¿Sabíais que hay rumores (¿infundados?) que circulan en esos círculos globales sobre el nombre de la empresa que sería la supuesta adjudicataria?
¿Qué pasará  el 25 de marzo… anunciado por Robert, ah? Hasta tonce, me despido con el mantram favorito de Viracocha¨: ¡Aauumm.. aauumm.. aauumm! 
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