La victoria no supone consuelo alguno para el combinado de Cuca, al que se esperaba en la final del torneo como favorito al título junto al Bayern Múnich alemán.

La derrota en semifinales contra el Raja Casablanca local frustró las expectativas brasileñas, que afrontó el choque contra el Guangzhou como un trámite incluido en el programa de la competición.

A pesar de ello, el Atlético Mineiro se encontró con el choque de cara a los dos minutos, con el tanto de Diego Tardelli. La ventaja no fue reflejo de lo sucedido sobre el césped. Pero el conjunto de Cuca aprovechó la frágil zaga del campeón chino.

En un inicio frenético, el equipo oriental dio la vuelta a la situación. Aprovechó la velocidad de su juego y el desconcierto de su rival para sacar ventaja de la situación. A los nueve minutos obtuvo el empate gracias a un remate del brasileño Luiz Guilherme da Conceicao Silva 'Muriqui', que adentró el balón en la meta rival después de dos rechaces, uno en el poste.

El Guangzhou, dirigido por el argentino Darío Conca, se hizo con el partido. Prolongó la inercia ascendente y antes del cuarto de hora, una falta de Lucas dentro del área fue castigada como penalti. Conca no falló y el equipo chino se situó por delante.

Con el Atlético Mineiro desorientado el cuadro oriental pudo cerrar el partido después. Otro brasileño, De Oliveira Cardoso Elkeson, pudo anotar el tercero del Guangzhou pero su remate dio en el palo.

Ronaldinho rescató al conjunto sudamericano. Un golpe franco, en la última jugada de la primera parte, dio aire al equipo brasileño. El magistral lanzamiento de 'El Gaucho' supuso el empate.

El ritmo bajó en la segunda mitad. Las ocasiones escasearon. A la hora de juego Muriqui, a centro de Conca, pudo volver a adelantar al Guangzhou.

El final fue frenético. Ronaldinho, que dio una patada a Xuri Zhao, fue expulsado a cinco minutos del final. El combinado chino no aprovechó la situación y el Atlético Mineiro tiró de experiencia. Así, en el tiempo añadido y con la prórroga como amenaza, Luan, que había saltado al campo en el minuto 60 en lugar de Jo, evitó la media hora extra y dio el tercer puesto al bloque brasileño.