El pasado miércoles en el estadio Reales Tamarindos, en el cotejo que jugaron Liga de Portoviejo y Delfín, aficionados de ambas escuadras protagonizaron incidentes.
REACCIONES. Milton González, presidente de la Asociación de Fútbol de Manabí, rechazó los incidentes que se produjeron el miércoles dentro y fuera del estadio. “Yo rechazo como tal los actos que incitaron a la violencia, ya que con la nueva ley se puede suspender a nuestros equipos”, dijo González. Para José Miguel Mosquera, abogado, el problema radica en una cuestión cultural. “Un ejemplo claro es cuando los balones se van a las gradas, muchas veces se pierden o los mismos aficionados los lanzan fuera del estadio, lo que es perjudicial para el equipo local, eso no es ser hincha”, dijo.
Mosquera.
González coincidió en señalar que pese al operativo policial faltó planificación de seguridad.“La barra de Delfín debió salir 15 minutos antes del encuentro, como se hace en otros estadios, para que los problemas no persistan”, señaló.
Roy Loor, exmiembro de seguridad de Liga de Portoviejo, pidió que los hinchas vayan a respaldar y no a pelear. “Deben animar el espectáculo con cánticos que motiven y no cantar algo que provoque o incite a las barras a caer en la violencia”, dijo Loor.
Cotejo en Manta.
Para el cotejo de vuelta que se jugará en el estadio Jocay el sábado a las 16h00, los directivos del Delfín preparan una exhaustiva seguridad para evitar cualquier problema. Delfín ha solicitado la presencia de 500 miembros de la Policía Nacional para que resguarden la seguridad en el estadio.