No es casualidad que un gran porcentaje de los turistas que viajan por todo el mundo sean adultos mayores, por la simple razón que tienen la salud, el tiempo y el dinero para hacerlo.  Son adultos activos, deseosos  de conocer lugares  exóticos, atractivos, diferentes; y Ecuador es uno de ellos.  Lo tenemos todo: Cuatro zonas distintas con diferentes climas, costumbres, geografía, gastronomía; gente amable y simpática en un pequeño territorio situado en la mitad del mundo.

La promoción a la que el Ministerio de Turismo ha destinado 600 millones de dólares para los próximos cuatro años es un monto pequeño para atraer los millones de turistas que deseamos nos visiten. Hay otros países de la región que hacen lo mismo, por lo que debemos ser inventivos y lanzar nuestra promoción al mercado antes mencionado, sin descuidar otras promociones.

Florida, Texas, New México, Arizona y California son estados donde se concentra la mayoría de las comunidades para retirados por el hecho que su clima es cálido, especialmente en las estaciones de otoño e invierno que atraen a los que viven en los estados norteños y canadienses, donde los inviernos son muy crudos y es donde hay que ir a promocionar a nuestro Ecuador.

Estudiantes universitarios norteamericanos que cursen mercadeo o comunicación en universidades aledañas a estas comunidades y que deseen extra créditos, armados con un DVD en inglés, que muestre todo lo bello y bueno de interés para los turistas y previamente capacitados por un coordinador de la Embajada, serían los indicados para  una presentación en la sala de eventos a los residentes de estas comunidades. Esta es una de las formas de promoción, como también lo es regalando viajes con estadía en un hotel del país a un programa con una audiencia de millones llamado Wheel of Fortune, en donde Costa Rica, las naciones caribeñas y  últimamente Nicaragua, lo hacen.  También, poniendo un anuncio en el boletín de AARP (Asociación Americana de Personas Retiradas).

Un matrimonio, empresa privada y gobierno es lo adecuado para alcanzar lo propuesto.  Conceder terrenos a un tiempo prudencial para la construcción de hoteles en sitios ecológicos frágiles y rodearlos de seguridad debe ser considerado para la tranquilidad, la inversión extranjera y nacional que tanta falta hace.