Cruzatty defendió su accionar en un caso de lavado de activos, lo que provocó la denuncia que hiciera en su contra el fiscal general Galo Chiriboga.
Fue denunciado y detenido a raíz de dictar un autoresolutorio en el caso que la Policía denominó "Cascabel" y en el cual están implicados tres españoles y dos ecuatorianas.
Lo hizo cuando era juez Décimo Quinto de Garantías Penales.
Después fue liberado por resolución de los jueces de una de las salas de Corte Provincial de Justicia.
En su versión dijo que se han desconocido sus derechos y se ha trastocado las bases del sistema jurídico y el estado constitucional.
"Al dictarme la prisión preventiva se ha sentado un mal precedente dentro de la función judicial de Manabí", dijo Cruzatty.
Agregó que se han resquebrajado los cimientos del sistema jurídico, lesionando seriamente el principio de autonomía, independencia y de imparcialidad.
"No se puede actuar fuera de derecho, por rumores o simples sospechas y buscar bajo cualquier circunstancia el apresamiento de la justicia", recalcó.
Cruzatty añadió que se ha puesto en tela de duda el poder discrecional y jurisdiccional de los jueces.
Señaló que continuará defendiéndose.