Él lo agradece a una crema llamada Hidyt.
El 14 de noviembre del año pasado, Rumazo, quien padece de diabetes, cayó en un estado crítico que desencadenó una gangrena en su pie derecho.
Tras varias consultas, el médico aseguró que decidió acudir a la parroquia Viche, del cantón de Quinindé, provincia de Esmeraldas, en donde su colega,  Víctor Hugo Angulo Borja, le ofreció un tratamiento a base de la crema que él había creado.  
Después de varias consultas, durante tres meses, Rumazo, de 58 años, salvó su pie de lo que pudo haber sido una amputación.
“En mi pie lo único que existía era muerte, sin embargo y a pesar de saber que estaba a un paso de fallecer, confíe en Víctor (Angulo) y ahora sé que esa crema es una sustancia efectiva. No estoy curado de la diabetes, pero sí de la gangrena”, dijo el médico.
Hidyt se llama el producto el mismo que ya fue patentado en Italia.
Ángulo, su creador, estudió medicina en la Universidad Central del Ecuador, en Quito, y luego obtuvo una beca para especializarse en diabetología en Roma.
Ver las necesidades de los pacientes con diabetes y los traumas psicológicos que les produce la amputación de sus extremidades, lo inspiró a investigar.
Según Rumazo gracias al tratamiento a base de la crema y varios complementos, se puede curar hemorroides, úlceras varicosas, traumáticas, quemaduras, leishmaniasi, piel diabética, pero siempre y cuando la herida esté limpia y depurada.
El tratamiento consiste en aplicar tres tipos de complementos de la crema.  
El primero es la desbridante que cumple con el objetivo de limpiar la herida, la segunda es granulante que provoca la multiplicación y crecimiento de las células que aún quedan vivas en la zona afectada, y la tercera es la revitalizante que regenera la piel y cierra la herida.