El régimen de Kim Jong-un lleva a cabo desde de marzo una dura ofensiva de amenazas y hostilidades hacia Corea del Sur y Estados Unidos. Corea del Norte anunció ayer la retirada temporal de sus más de 50.000 trabajadores del complejo industrial de Kaesong, un acto sin precedentes que, en plena tensión, profundiza la crisis entre las dos Coreas en torno a su único proyecto conjunto.