El Diario (ED). ¿A través de qué actividad sirve usted a los demás? 

Luis Jiménez (LJ). A través del comercio se tiene la oportunidad de servir a los demás. Uno convive con la población de todos los niveles sociales. He visto el desarrollo de la parroquia. Una tienda es un “medidor” de la realidad de un pueblo.

 

ED. ¿Por qué dice ser un campesino con raíces propias?

LJ. Pese a ser profesional y ocupar un puesto importante en la parroquia, no he cambiado mi estilo de vida y es el don de servicio a los pobres.

 

ED. ¿Su vida cambió al asumir la presidencia de la Junta Parroquial? 

LJ. Sigo siendo humilde y servidor a los que tienen necesidades. Dedico más de 12 horas diarias al comercio, la actividad agrícola que es familiar y la Junta Parroquial. Es una muy bonita experiencia el servir desde el comercio, la profesión, la agricultura y como autoridad parroquial.

 

ED. ¿Qué es para usted el don de servir? 

LJ. Es aportar de acuerdo a las posibilidades y a la realidad que se vive. Con la vida hay que ser muy agradecido y tener siempre presente que hay mucho por hacer en el sector que uno  habita.

 

ED. ¿Los recursos económicos que recibe la Junta Parroquial alcanzan para obras importantes?

LJ. En un pueblo a diario hay necesidades y hay que saber administrar bien el dinero. Es muy importante el apoyo que da el Gobierno Nacional para importantes obras que necesitan zonas en desarrollo como San Plácido.

 

ED. ¿Qué les pide usted a los habitantes de su pueblo? 

LJ. Que estén unidos, aporten con ideas de desarrollo y sean buenos ciudadanos. Tener fe que la parroquia, en base al trabajo de su gente, progresará. Los moradores deben poner un granito de arena para tener una parroquia que crece.