Así describió Bertha Quimís las circunstancias en que Gilmer Eduardo Baque Ponce, padre de su hija de tres meses de nacida, se suicidó. 

La mujer contó cómo a las 16h00 del sábado su cónyuge salió de su vivienda, ubicada en el sitio Santa Rosa de la parroquia Sixto Durán Ballén -extremo centro sur de Manabí- del cantón 24 de Mayo 

 

Fuera de control. Mencionó que alrededor de las 20h00 regresó en estado de ebriedad, hablando cosas incoherentes y diciendo que alguien le había contado algo. 

Estaba fuera de control y así se alejó nuevamente de la vivienda en dirección al despeñadero, dijo.

Bertha también expresó que dos niños que estaban en la casa siguieron a Gilmer, sin embargo como les llevaba ventaja fue imposible que lo alcanzaran a tiempo.

Los menores vieron que Baque se bajó del caballo, caminó por el riachuelo y sin pensarlo dos veces se lanzó al fondo de la cascada, donde golpeó con unas grandes rocas que le causaron las heridas mortales, señaló. 

Los testigos avisaron a moradores del sector y en conjunto bajaron un cerro hasta llegar al fondo de la cascada y rescatar el cadáver. Por la distancia que hay con la Unidad de Policía Comunitaria más cercana, la de la parroquia Noboa, fue imposible que esa misma noche se realizara el levantamiento del cuerpo. Ayer en la mañana los uniformados cumplieron dicha diligencia. 

Próspero Ponce, tío de la víctima, recordó que hace seis años, su hermano, Olegario Ponce, también murió igual que su sobrino, solo que se lanzó a un abismo en otro lugar. 

Gilmer Baque era hijo de Betsy Ponce Baque. Su cuerpo será sepultado la mañana de hoy en el cementerio del sitio Las Piedras. <