El incendio se produjo la noche del viernes aproximadamente a las 22h30 en la ciudadela 20 de Mayo, en Manta.

La mujer estaba sola y dormida cuando las llamas comenzaron a propagarse por toda la casa. Cristina, con el hablar pausado por el peso de los años, narró que el fogaje la despertó.

Al abrir sus ojos observó una imagen del Sagrado Corazón de Jesús envuelta en llamas. Enseguida se puso de pie y mientras gritaba pidiendo auxilio, trató de tomar un recipiente con agua para apagar el fuego, que ya había alcanzado parte de su habitación. Cuando lanzó el agua las llamas alcanzaron su vestimenta y fue en ese momento que unos vecinos ingresaron y la rescataron. Doña Cristina sufrió quemaduras leves en sus manos. 

 

Llegaron los bomberos. 

Los bomberos llegaron después de unos 15 minutos pero el fuego ya lo había consumido todo y lo único que pudieron hacer es controlarlo. 

“Por suerte mi madre no había puesto candado en su puerta como era su costumbre, sino hubiese sido presa de las llamas, que en cuestión de minutos destruyeron todo”, dijo su hija también llamada Cristina.

Las causas del incendio no están claras, pero según los bomberos el origen habría sido un cortocircuito. Ayer por la mañana, doña Cristina regresó a ver su casa destruida. La recorrió mirando los restos quemados de su ropa, muebles, artefactos eléctricos. Todo estaba en cenizas.

 “No tengo nada, mi casa es por mi trabajo de toda la vida, no tengo a dónde ir”, decía, mientras los vecinos la escuchaban consternados.

“Mi madre está muy triste porque es una mujer independiente que no le gusta molestar a nadie por eso vive sola”, dijo su hija. 

Piden ayuda para reconstruir la vivienda de la señora.<

 

Doña Cristina necesita ayuda