"Debido a las terribles relaciones entre los dos países y la situación en Siria, los pasajeros estaban preocupados por aterrizar allí", dijo un hombre que pidió no ser identificado.
Al aterrizar, los responsables del aeropuerto manifestaron que no aceptaban pagos con tarjeta de crédito y que solo cogerían efectivo, explicó una portavoz de Air France.
"Como medida de precaución y de forma anticipada, la tripulación preguntó a los pasajeros cuánto dinero tenían en efectivo para pagar el repostaje", añadió.
Finalmente la aerolínea pudo pagar la cuenta sin utilizar el dinero de los pasajeros, pero declinó comentar cómo se había abonado o cuánto costó el repostaje.
Este hecho insólito ocurrió también con la aerolínea austríaca Comtel Air, cuando quedó varada en Viena en noviembre del pasado año. En este caso, los pasajeros debieron desembolsar más de USD 30.000 para poder costear el precio total de la gasolina.<