El régimen sirio ha elevado la intensidad de su represión sobre los civiles en los barrios y localidades controlados por los rebeldes, con una nueva jornada de bombardeos sobre la población y el hallazgo de cadáveres ejecutados.
Pese al creciente aislamiento internacional del régimen del presidente sirio, Bachar al Asad, con su expulsión de la Organización de Cooperación Islámica, las fuerzas gubernamentales prosiguieron con sus bombardeos a los feudos opositores.
Alepo, escenario desde hace un mes de una brutal batalla por su control entre el Ejército y los rebeldes, fue de nuevo una de las ciudades más castigadas por la violencia.
La activista independiente Wed al Hayat dijo que 40 personas murieron y otras tantas resultaron heridas por un ataque de las tropas del régimen contra una panadería.
TERMINÓ MISIÓn. El Consejo de Seguridad de la ONU dio por concluida la misión de los observadores en Siria, cuyo repliegue se iniciará en los próximos días pese a la oposición de Rusia a través de su representante, que convocó para hoy una reunión del Grupo de Acción en la sede central del organismo para pedir el cese de la violencia. <