AI ha dado la bienvenida al fallo de un tribunal interamericano, anunciado este miércoles, a favor de ese pueblo, que ha puesto fin a una batalla legal de diez años, después de que las autoridades de Ecuador permitieran en 1996 a la Compañía General de Combustibles (CGC) explotar las tierras de los Sarayaku sin previa consulta.

Esa empresa argentina entró en la zona con el apoyo de soldados ecuatorianos, mientras que la comunidad indígena se movilizó para defender su territorio y logró expulsarla tras una disputa que no causó víctimas, motivo por el cual el actual Gobierno ecuatoriano indemnizó recientemente a CGC con 20 millones de dólares.

El pasado 21 de abril, Ecuador admitió la responsabilidad del Estado por la violación de los derechos de ese pueblo al haber concedido el permiso a la petrolera sin conocimiento de los indígenas.

En un comunicado emitido hoy en Londres, la investigadora sobre derechos económicos, sociales y culturales de las Américas para Amnistía, Fernanda Doz Costa, dijo que la sentencia "tendrá un efecto de largo alcance sobre países de la región" para poner en marcha procesos de consulta antes de involucrarse en proyectos que afecten a comunidades indígenas o sus derechos.

El fallo "establece en detalle cómo deberían llevarse a cabo procesos de consulta: de buena fe y mediante procedimientos apropiados culturalmente que tengan como objetivo llegar a un consenso", señaló Doz Costa.

Esta responsable subrayó además que "la exploración o extracción de recursos naturales no puede realizarse a expensas de los medios de supervivencia física o cultural de comunidades indígenas en su propia tierra".

Ese dictamen a favor de esa comunidad amazónica se produce en un momento clave en el que muchos Gobiernos de la región niegan a los indígenas de las Américas su derecho a hacerse oír cuando se trata de adoptar decisiones que tienen consecuencias devastadoras para su supervivencia, afirmó la organización.

Por su parte, el líder sarayaku, José Gualinga, afirmó en la misma nota de AI que su pueblo se siente "extremadamente satisfecho con esta victoria, alcanzada gracias a los esfuerzos de nuestras gentes y la ayuda y solidaridad de organizaciones dedicadas a los derechos de los indígenas".

Por ello, Gualinga también se mostró convencido de que esa victoria tendrá un impacto en toda la región.