Confiesa que por la pasión que siente al cantar, en especial melodías de tango, ha cometido una que otra "locura".

Por citar sólo un ejemplo, contó que hace 66 años trató de escaparse de su casa para unirse al grupo de la cantante italiana Enriqueta Martillo.

"Estaba decidida de hacerlo porque quería cantar tango, pero no pude porque mi mamá me descubrió y lo impidió", dijo.

Durante un año y medio de su vida se dedicó a la docencia.

Dio clases de canto en  el jardín de infantes Amado Quiroz. También fue directora encargada de la entidad.

Actualmente Rivero tiene 81 años.

Bibliotecaria. Como se dijo antes, aparte del canto, otra de las cosas que cautivan a Rivero es el conocimiento. 

aunque no precisó cuántos años trabajó en la biblioteca municipal, mencionó que hace dos meses, en abril, se jubiló.

 

Poetisa. Para Rivero la poesía es sinónimo de consuelo y desahogo.

Escribió una poesía llamada "La foto en la pared".

Esta poesía la hizo en honor a su madre ya fallecida.  "He escrito bastantes poesías pero no las publico", finalizó.