Cada uno tendrá sus propios indicadores. Por ejemplo, del docente se evaluará su desempeño pedagógico, el desarrollo de los conocimientos dentro del aula, la implementación del currículo académico, el manejo de la clase y la comunicación e interacción con sus estudiantes, informó Monserrat Creamer, subsecretaria de Fundamentos Educativos.

La viceministra de Gestión Educativa, Mónica Franco, indicó que la evaluación sería para 31.000 establecimientos educativos, públicos, privados y fiscomisionales. Pero datos del propio ministerio suman 25.129 instituciones repartidas en 18.630 fiscales, 599 fiscomisionales, 295 municipales y 5.605 particulares, informó diario El Universo. 

En el estándar de aprendizaje prevé conocer las habilidades, conocimientos y logros educativos que los estudiantes alcanzaran en su trayectoria escolar.

Dentro de los estándares de Educación General Básica (EGB) y Bachillerato se han establecido  cuatro áreas del currículo nacional (Lengua, Matemática, Ciencias Naturales y Estudios Sociales), así como en el uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC).

Los directivos de las instituciones educativas serán evaluados por sus prácticas de gestión y liderazgo, la buena gestión del centro escolar, y los logros de aprendizaje de los estudiantes, lo cual está dentro de los estándares de desempeño directivo. 

Mientras que en los estándares de gestión escolar hacen referencia a los procesos de gestión y prácticas institucionales que contribuyen a que todos los estudiantes alcancen logros académicos.

En cuanto a la infraestructura, de acuerdo con Creamer, se tomará en cuenta el contexto de cada institución. Una institución urbano marginal o rural tiene distintos contextos y características, pero todas deben tener componentes básicos para la seguridad y el aprendizaje del niño, dijo.

Franco indicó que en caso de identificar ciertas debilidades en centro educativo habrá un proceso de acompañamiento junto a un asesor educativo (antes supervisor) que dirigirá un plan de mejora institucional. En caso de que no se cumplan los estándares, se aplicarán sanciones: como la suspensión temporal hasta el cierre definitivo de la institución educativa.

El presidente de la Federación de Establecimientos Particulares de Educación Laica, Fedepal, Roberto Briones, considera necesaria la evaluación siempre y cuando esta sea técnicamente realizada.

“Lo único que queremos es que no sea de un día para otro, sino un proceso que permita hacer ajustes de acuerdo a los parámetros de calidad exigidos”, expresó, e indicó que requieren que la evaluación no sea de la noche a la mañana, sino que las autoridades den un tiempo prudencial como se lo dio a las universidades, indicó Briones. 

La presidenta de la Confederación Ecuatoriana de Establecimientos de Educación Católica, Sor Alba Arreaga, comparte la decisión gubernamental: “Es saludable y beneficioso que los establecimientos sean evaluados para saber en qué puntos mejorar”.