PEDERNALES. Un cerro se vino abajo ayer en el sitio Piedra Maluca y bloqueó el río Coaque a unos 4 kilómetros antes de la parroquia Atahualpa. Vía telefónica el prefecto de Manabí, Mariano Zambrano, confirmó que la afectación interrumpió el paso vehicular.  "Varias casas quedaron prácticamente sepultadas por el agua, afortunadamente no hay pérdidas humanas", mencionó la autoridad provincial, quien destacó que la tierra del deslizamiento había ocasionado un dique en el lugar y también el desbordamiento del río que afectó además a los cultivos. Por su parte Miguel Camino de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos, indicó que con la maquinaria que se tiene trabajando en el lugar, en dos días habrán superado el problema. Hubo que evacuar a unas 400 familias, y se negoció con hoteles de Pedernales para su alojamiento.

 calceta. En el barrio "La Karina" de Calceta, los niños son los más perjudicados. Jean Carlos, de 10 años, a quienes sus amigos y familiares le dicen cariñosamente "Gato", tiene cinco días con una especie de hongos en los pies. Su madre, Socorro Santana, dijo que primero comenzó a notar que el niño tenía enrojecidos los dedos. "Pero de un momento a otro ya tiene pelados los pies". No es el único con este mal. Hay varios menores con la misma afectación. "Eso pica de noche y aunque nos ponemos agua de sal, la comezón no pasa", dijo Magdalena Zambrano. "Aquí queremos que nos den pomadas y botas", reclamó Luz Bazurto, quien dijo que los brigadistas no ingresan hasta el final de la calle. "Sólo vienen a las afueritas y entregan las raciones a unos cuantos", dijo con tono de indignación.
 ALBERGUES. Los problemas de salud, tras una semana de inundaciones en la cabecera cantonal de Bolívar, también llegan a los albergues. Ayer en la escuela Viliulfo Cedeño, la niña Mélida Santana de 8 años, lloraba desconsolada porque le dolía la cabeza y el oído derecho. Los médicos que hacen las visitas a los refugios la chequearon y dejaron medicinas para su tratamiento. Sucedía mientras Luxiola Briones se quejaba porque sus condiciones de salud no le permiten consumir los alimentos que les dan en las raciones del MIES. "Yo soy diabética y no puedo comer enlatados y eso es lo que más nos dan. Ayer consumí sardinas y me causó cólicos", mencionó esta mujer que fue evacuada del sitio "El Morro".  "Hacemos hasta dos visitas diarias a los seis albergues de Calceta y los problemas que encontramos son respiratorios y gastrointestinales", dijo el médico José Schettino.

 TOSAGUA. El problema se mantiene en los sectores rurales. La vía Los Amarillos - Las Botijas" recibe un mantenimiento emergente con colocación de grandes piedras. Hace dos semanas, la base del puente fue arrastrada por la fuerza del estero Las Maravillas. Ángel Pazmiño, el vicealcalde, dijo que un nuevo puente costaría 500 mil dólares. "El Gobierno provincial nos ha ofrecido que éste será incluido en el plan de obras de reconstrucción tras el invierno", dijo.<