Nelson Alcívar trabajaba como guardia en el hospital del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) de Manta.

Su muerte salió a relucir en una audiencia de dictamen que se realizó ayer en el Palacio de Justicia.

El fiscal Vicente Párraga, al emitir su dictamen, dijo que hay que investigar este crimen porque Alcívar era muy parecido físicamente a uno de los guardias que alertó a la Policía del robo de medicinas que se produjo el 11 de agosto del 2011.

Amenazas de muerte, intentos de soborno, intimidaciones y presiones han sido la tónica durante la investigación de este hecho.

 

 el robo. La madrugada del 11 de agosto se robaron de la farmacia del hospital medicamentos que después fueron colocados en 23 fundas de color negro. 

Los sospechosos fueron sorprendidos cuando intentaban llevar la medicina, valorada en cien mil dólares, hasta Portoviejo.

 implicados. Por el caso están procesados Darwin Bazurto Navarrete (guardia), Luis Cedeño Zambrano (guardia), William Alcívar Vélez (enfermero del IESS), Oswaldo Limongi Santos (exfuncionario del IESS, Portoviejo) Gonzalo Rodríguez Ríos, (exdirector del hospital del IESS, Manta), Iván Mario Bravo Guadamud (guardia), Cristihian Zambrano Cevallos y Walter Pérez (taxista).

En su exposición, el fiscal Párraga se refirió a testimonios de guardias que aseguran que cuando el robo fue descubierto y luego denunciado, no faltaron las amenazas de muerte contra dos compañeros de la empresa Ambaseg, que fueron los que alertaron a la Policía del robo e incluso rechazaron un soborno.

Las amenazas, según testimonios que fueron leídos por el Fiscal, provinieron de William Alcívar, uno de los procesados

Además, el fiscal dijo que Mercedes Chilán, auditora de la Contraloría Portoviejo, ha recibido mensajes amenazantes al celular, ya que ella está a cargo de la auditoría en el hospital, que, según el fiscal, ha sido el escenario de robos anteriores y sistemáticos.

 

 intimidación. Otra persona amenazada es María Murillo, exencargada de la farmacia, quien con anterioridad a la fecha del delito denunció el robo y en sus declaraciones ante la Fiscalía ha dado a conocer información que se ha utilizado para involucrar al exdirector del hospital (Rodríguez).

Carlos Fuentes, abogado de Murillo, dijo que hace tres meses dos motociclistas llegaron al domicilio de ella e intentaron ingresar.

La mujer no les creyó y luego los motociclistas se retiraron. “La situación es preocupante”, dijo Fuentes, al tiempo que comentó que su cliente teme por su vida.

El fiscal acusó a Darwin Bazurto, Luis Cedeño, William Alcívar y a Cristhian Zambrano como autores. Y a Gonzalo  Rodríguez y  Oswaldo Arturo Limongi como cómplices.

Se abstuvo de acusar a Iván Bravo y a Walter Pérez.