Ecuador se protege hoy del lavado de activos y del financiamiento de delitos con nuevas normas nacionales que determinan procedimientos y políticas de control en el registro de envíos y recepciones de remesas.
Según la agencia pública Andes, los controles a cargo de la Superintendencia de Compañías deberán ser aplicados en base a cantidades iguales o superiores a tres mil dólares o el equivalente en otras monedas.