Víctor Almache Rodríguez es quiteño. Nació en 1944. Llegó cuando tenía 17 años de edad. La casa de su tío y comerciante Jacinto Oña fue su primer hogar en la capital provincial.
Almache cuenta que desde ese entonces se inclinó por el comercio. Hoy ocupa un puesto en las calles Chile y Francisco de Paula Moreira.
Recuerda que eran tiempos diferentes. En su caso inició como vendedor ambulante. Todo giraba en ese entonces en lo que era el mercado municipal ubicado exactamente donde hoy está el edificio del centro comercial.
Después se puso un puesto a un costado el almacén Lozada, ubicado en las calles Ricauerte y 9 de Octubre. En ese lugar permaneció aproximadamente 20 años.
Hace 30 años lo reubicaron en su actual puesto. No recuerda exactamente la fecha ni el alcalde. “Este era un sitio feo. Acá amarraban las bestias de los campesinos. Eran pocas las casas”, declaró Almache.
Dice que habían pocos comerciantes. Eran entre seis y siete. “Ahora hay más comerciantes y pocos compradores”.
Almache se casó con Nelly Loor Zambrano, procreó cinco hijos, pero sólo uno le sigue los pasos.
“Para mí Portoviejo es mejor que Manta. Acá sus calles son amplias y no hay que subir lomas”, señaló.

  Comercio. El cronista Ramiro Molina, destaca que en Portoviejo el comercio ha existido desde la època aborígen y con la llegada de los españoles se desarrolló acorde al tiempo que existía.
Molina considera que la capital provincial desde su època colonial hasta mediados del siglo 20, basó su economía en la agricultura y el comercio.
“Era un comercio que se alimentaba de la agricultura y los sueldos de los empleados públicos”, señala Molina.
Los comerciantes e intermediarios de Guayaquil tuvieron a Portoviejo como su fuente de abastecimiento.
El comercio tomó un fuerte impulso a partir de la década del setenta con la construcción de los servicios básicos y obras de infraestructura.
“Empieza un cambio urbanístico en la ciudad, las casas de caña y madera empiezan a ser reemplazadas por hormigón”, señala García. 
Agrega que ese circulante que empieza a generarse en gran cantidad hace que mucha gente se dedique al comercio.
En la actualidad Portoviejo dejó de ser agrícola. Según el último censo económico de 8.216 negocios, 4.463 se dedican al comercio al por mayor y menor; reparación de vehículos y motocicletas. <

 

ACTIVIDADES COMERCIALES DE PORTOVIEJO

Empresa    Cantidad
 Agricultura, ganadería,  silvicultura y pesca    13
 Explotación de minas y canteras    1
 Industrias manufactureras    665
 Suministro de electricidad, gas, vapor
    y aire acondicionado.    6
 Distribución de agua; alcantarillado, gestión
    de desechos y actividades de saneamiento.    11
 Construcción.    36
 Comercio al por mayor y al por menor; reparación
    de vehículos automotores y motocicletas.    4.463
 Transporte y almacenamiento.    85
 Actividades de alojamiento y de servicio de
    comidas.    836
 Información y comunicación.    230
Empresa    Cantidad
 Actividades financieras y de seguros.    53
 Actividades inmobiliarias.    29
 Actividades profesionales, científicas y técnicas.    179
 Actividades de servicios administrativos y de
    apoyo.    80
 Administración pública y defensa; planes de
    seguridad social de afiliación obligatoria.    67
 Enseñanza.    334
 Actividades de atención de la salud humana
    y de asistencia social.    362
 Artes, entretenimiento y recreación.    144
 Otras actividades de servicios.    622

TOTAL    8. 216

Fuente: CENSO ECONÓMICO INEC

 

ANÉCDOTA HISTÓRICA

En 1915 fue
inaugurado el servicio telefónico

La primea forma de concesión de servicios públicos que se produjo en Portoviejo data del año 1913. Ese año, en el mes de Noviembre, Don Jorge Isidoro Lara se dirige al Municipio de la ciudad y pide se le autorice a instalar una red telefónica por 25 años, ofreciendo a cambio dar gratuitamente 4 líneas para el municipio y 1 con medio pago para el hospital.
Y hubo teléfonos para Portoviejo. El 1 de junio de 1915 se inaugura el servicio con equipos americanos. Fueron 92 líneas semiautomáticas, manejadas por los operadores Carlos Balda y Diego Zevallos, las que funcionaron, apenas 15 años después de las primeras del país.
Don Isidoro Lara incursionó en la hotelería y en el transporte: en 1918 abrió el Hotel Miami, el primero en Andrés de Vera, y la empresa “La Veloz” con carros que llevaban pasajeros a la periferia de la ciudad y que en 1919 fe objeto de la primera huelga de choferes de la provincia.
Colaboración
Alfredo Cedeño
Médico/ Historiador

 

 

MINI
ENTREVISTA

¿Cómo se inició en el negocio?
El 28 de agosto de 1945. De agricultor me hice comerciante, me recuerdo que un tio me dice, 'pero como te vas a hacer comerciante' y le respondí, tío yo si a la luna me voy allá subsisto. Fuimos socios con Adriano Zambrano Palma.
¿Cuántos artículos vende?
Hubo una época que vendíamos desde una aguja hasta un automóvil.  Este es el almacén de los cinco mil artículos.
¿Qué le recomienda a los jóvenes comerciantes?
Primero tienen que emplear esto (la cabeza) y después ponerse una pantalla  que le sintonice su cerebro.

 

Ramón Andrade Pazmiño
Dueño almacén La Norma