El presidente electo, Rafael Correa, visitó este jueves, la frontera norte para constatar los supuestos daños producidos por las fumigaciones aéreas colombianas con glifosato a los cultivos ilícitos.
Correa llegó en avión a la provincia de Sucumbíos (noroeste) acompañado de varios de sus ministros designados y jefes militares para "estar junto a las víctimas de las aspersiones", informó una fuente del Gobierno.
El mandatario electo sobrevoló en helicóptero las poblaciones de Salinas, San Francisco y 10 de Agosto, en Sucumbíos, donde la Policía Nacional confirmó la inexistencia de cultivos de coca, como lo denunció el pasado lunes, las autoridades colombianas.
Correa, que hace una semana suspendió una visita a Colombia en represalia por el reinicio de las aspersiones, declaró que está "muy preocupado por los bombardeados con glifosato (herbicida utilizado por Colombia para las fumigaciones) en la frontera".
Por lo que ha planteado a Colombia la suspensión inmediata de las fumigaciones aéreas en la frontera y reemplazarlas por manuales, pues -expresó- en el lado ecuatoriano "matan cultivos lícitos y hasta cultivadores".