Restos humanos y vasijas de barro que podrían ser parte de un cementerio indígena, fueron ubicados en la vía Chone-Tosagua, a cien metros del nuevo cuartel policial.
La noticia transcendió ayer, pero el pasado sábado varios obreros -que laboran en la ejecución del desagüe San Antonio, obra incluida en el Proyecto Propósito Múltiple Chone-, se dieron cuenta que la pala mecánica golpeó un objeto redondo que estaba rodeado de huesos humanos.
La curiosidad llevó al operario a acercarse al sitio del hallazgo, y divisó una olla de barro, conocida técnicamente como urna funeraria, incrustada en la tierra. Un fémur, pelvis, entre otros huesos, podían verse con facilidad.
respuesta lenta. Sin embargo, recién ayer, después de las 11h00 llegó personal policial para proteger el lugar e impedir que curiosos lo contaminen mientras no acudan expertos de Patrimonio Cultural. También a las 14h00 arribaron miembros del Departamento de Cultura del Municipio de Chone para conocer de qué se trataba el hallazgo.
Humbolt Moreira, jefe político de Chone, dijo que se comunicó a la gobernación para que se envíe un equipo de expertos a la zona y se recomendó a la empresa china Tiesijú no laborar en el lugar, hasta que se tenga un resultado.
reacción. El ecologista Boris Zambrano aseguró que hace un año denunció al INPC en Portoviejo que las obras de la fase I del PPMCH, la presa Río Grande y el desagüe San Antonio, no tenían estudios arqueológicos definidos y que se iban a dañar valiosos testimonios de nuestros antepasados.
La historia registra que este territorio estuvo habitado por varias fases culturales entre las que destacan Valdivia (4000-1500 a.C.), Machalilla, Chorrera, Bahía y Jama Coaque. <