Y decimos que esto es un nuevo intento porque desde hace algunos años la antigua Defensa Civil venía demandando de todas las corporaciones municipales la elaboración del documento que permita guiar las labores de prevención, de protección y de auxilio a la población, en bienes y vidas, cuando se presenten las emergencias naturales o las creadas por el hombre.
Sin embargo en la provincia este pedido ha tenido pobre eco en los gobiernos provincial y municipales de Manabí, pues muy contados son los concejos cantonales que respondieron al pedido porque la Defensa Civil poco atractivo ha despertado, excepto cuando llega la emergencia, especialmente por lluvias o por sequía, que es cuando se rasgan vestiduras por docenas.
Portoviejo es uno de esos pocos cantones que, aunque tardíamente, respondió de alguna manera a esta obligación; y hace bien la corporación edilicia al encuadrarse a lo dispuesto por el Código Orgánico de Organización Territorial, Autonomía y Descentralización (COOTAD) que obliga a los gobiernos autónomos la elaboración de la ordenanza respectiva a ser aplicada cuando se presenten las emergencias, que deberá ser enviada a la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgo para las observaciones pertinentes, previo a su aprobación definitiva.
Esta labor es plausible y esperamos que permita a la corporación recobrar la actividad fecunda confundida en vericuetos que han desviado el rumbo de sus integrantes. <