"Por la renegociación de los contratos petroleros, solo este año, estamos recibiendo $800 millones que antes iban a los bolsillos de las transnacionales", resaltó Correa en unas declaraciones que recoge el periódico oficial El Ciudadano.

 

A finales del año pasado, Ecuador renegoció sus contratos petroleros con las compañías privadas, que según el nuevo acuerdo pasaron a recibir una tarifa fija por cada barril bombeado, mientras que el dueño legal del petróleo es el Estado.

 

Con ello, el alza del crudo repercute en beneficio del Gobierno, lo que le ha supuesto ingresos adicionales con la subida del petróleo en lo que va de año.

 

A finales de 2010 el precio del petróleo rondaba los 90 dólares por barril, mientras que hoy cerró en casi 97 dólares en la bolsa de Nueva York, después de haber superado los 100 dólares en días pasados.

 

El petróleo es el principal producto de exportación de Ecuador, el quinto extractor de crudo en América, y los ingresos que se generan por su venta financian alrededor del 25 % del presupuesto general del Estado.

 

Correa también defendió los negocios de su país con China, que se ha convertido en su principal prestamista externo.

 

"Qué mejor que a China le vendamos petróleo a mediano plazo y ellos nos den ahorita la plata" dijo el mandatario.

 

En las últimas semanas el Eximbank de China anunció un crédito por unos 571 millones de dólares para financiar una central hidroeléctrica en Ecuador y la empresa estatal Petroecuador ha dicho que exportará 130 millones de barriles de crudo a Petrochina en los próximos seis años.

 

Asimismo, el estatal Banco de Desarrollo de China otorgó un préstamo de libre disposición a Ecuador por 2.000 millones de dólares, que se une a otras operaciones de financiación en los últimos años entre ambos países.