En los últimos días se suscribió en la Universidad Técnica de Manabí (UTM) un importante convenio de cooperación con el propósito de generar capacitaciones, en el Ecuador y en el extranjero, a jóvenes estudiantes próximos a profesionalizarse, para que se especialicen en las actividades propias de un proyecto hidrocarburífero, adquieran conocimiento y experticia, y puedan posteriormente laborar en la Refinería del Pacifico que se construye en esta provincia, o en cualquier complejo petrolero del mundo.

Este es uno de las oportunidades que llegan cada cien años, como el cometa Halley, y que los manabitas, representados en los estudiantes de la UTM  que cursen los últimos niveles en los campos profesionales afines al propósito antes enunciado, tienen que aprovechar. 
El costo de la capacitación local y en el extranjero, onerosa por cierto, estará a cargo del Estado o de las empresas petroleras, que por necesidad deben y tienen  que escoger personal que resida en esta área geográfica cercana a la refinería,  para laborar en este proyecto petrolero.  Esta es  casi una política de las empresas del campo petrolero.
Siendo así, las puertas para la capacitación están abiertas, la UTM ha iniciado un proceso, se tiene que ejecutar y hacerle el seguimiento, y principalmente corresponde a los estudiantes poner empeño en preparase.
Primero tenemos que aprender idiomas extranjeros, principalmente el inglés; por suerte en este mismo centro de estudios superiores ya existe una escuela en donde se enseña este idioma y  con solvencia ha venido preparando a manabitas por varios años.
Segundo, estudiar y estudiar, prepararse en estos campos de la academia, sembrar para poder cosechar mañana,  recoger esos frutos que entrega el conocimiento y el trabajo, para beneficio de sus familias y de la sociedad principalmente.
Estos jóvenes futuros profesionales, probablemente tendrán un trabajo estable, seguro y bien remunerado, estarán en posibilidad de capacitar en estos temas a las generaciones que les siguen, estarán inmersos en un roce profesional de primera que repercutirá en el desarrollo local y nacional.
El pitazo del partido se ha dado, insisto nos corresponde difundir este convenio y sus ventajas a los jóvenes estudiantes, motivarlos, ayudarlos para que emprendan en este desafío; de lo contrario ocurrirá lo de siempre, otros vendrán a ocupar los puestos de trabajo en la refinería y nosotros seguiremos lamentándonos y lamentándonos.
La historia tenemos que escribirla con preparación y conocimiento, este es un  nuevo reto que lidera la Universidad Técnica de Manabí; ayudemos a que se cumpla el objetivo. Es una tarea de todos.<