Indica que a su edad no le dan trabajo en ninguna empresa y si desea abrir algún negocio también le ponen trabas al momento de realizar algún crédito.

Al igual que Pazmiño, Vicente Álava ha trabajado durante 48 años como chofer. Ambos han conducido buses de las cooperativas Reina del Camino, Carlos Alberto Aray, camiones, tráileres, buses urbanos y hasta taxis.

Álava menciona que por la edad se le hace difícil también renovar una licencia. “Lo único que sabemos hacer es conducir y nada más, nunca estudiamos ni nos especializamos en nada, entonces tenemos que morir y dejar que nuestras familias se mueran de hambre.

 

Asociación. Según los registros de la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) a nivel nacional hay 950 mil choferes profesionales que no se han jubilado.

De este número 30 mil son de Manabí y seis mil específicamente de Manta.

Álava dijo que desde hace siete meses se viene trabajando en la conformación de la Asociación de Choferes no Jubilados del Ecuador y que incluso el presidente Rafael Correa conoce del proyecto y que fue enviado a Ricardo Antón, director nacional de la ANT para que se reúna con los choferes.

Álava, quien en la actualidad tiene una buseta con la que realiza recorridos, dijo que el proyecto tiene tres puntos.

El primero consiste en que los choferes que cumplan la tercera edad (65 años) dispongan de un salario mínimo vital cada mes, dinero que sería entregado por el Gobierno, una vez que decidan dejar de conducir, o sea jubilarse.

El segundo punto es que los choferes que así no formen parte de la tercera edad y que sufran algún accidente que no les permita laborar también se beneficien con este bono. 

El último y tercer punto es que en caso de muerte de algún chofer por accidente o causa natural se le entreguen cinco mil dólares a la familia para gastos mortuorios. Los choferes beneficiados de esto solo serían quienes formen parte de la Asociación.

 

Seguros. La mayoría de los choferes no cuentan con un seguro médico o de vida a excepción de aquellos que trabajan en empresas que los aseguran. De acuerdo a las modificaciones que se realizaron en la Ley de Tránsito el año pasado y a raíz del accidente de un bus de la cooperativa Reina del Camino en el que murieron 39 personas en diciembre, los choferes de las cooperativas de buses debían ser asegurados, pero esto aún no se cumple.

Otro de los cambios que se propuso es la obligación de las cooperativas de transporte para que den la información detallada de los choferes y que los mismos estén afiliados al seguro social, pero según un chofer de un bus de la cooperativa Vuelta larga, esto tampoco se cumple. Los choferes que deseen saber más detalles de la Asociación pueden comunicarse con Vicente Álava al 099-11-21-11.