Tras la conclusión del debate de la Ley de Personal de la Fuerzas Armadas, el presidente del Parlamento, Wilfrido Lucero, fue el encargado de clausurar el congreso extraordinario de sesiones y el período legislativo 2002-2006, la cual se dio en el hemiciclo del Palacio Legislativo, el cual fue habilitado para la última sesión de los parlamentarios que concluyeron su período como diputados.