Y es que por susto o por la advertencia del nuevo mandatario, quien ha dicho que no respetará o que para él no serán válidos contratos de última hora, se pudieran estar quedando sin piso temas tan fundamentales para Manabí como son la segunda etapa del sistema de canales del Carrizal, el puente entre Bahía y San Vicente o proyectos de varios municipios que a última hora “pujan” porque salgan los recursos que en su momento fueron comprometidos para obras fundamentales en cada jurisdicción, y que por el “tortuguismo” de la burocracia recién por estos días están a punto de concretarse. Desde esta región hacemos fuerza para que un gobierno como el actual ( y que no ha sido de lo mejor) cumpla con su palabra de “gobernar” hasta el ultimo día; y eso quiere decir que la alta cúpula gubernamental no puede ni debe dejarse “manosear” por los famosos mandos medios, que a estas instancias creen que ya no deben hacer caso a quien está a punto de irse, o de volverse “lisonjeros y obsecuentes” con quien o quienes llegan a “mandar” desde el próximo enero. Esta última conducta es la que “mata” aspiraciones como las nuestras, pues los centralistas no entienden que para el caso del crédito para los canales de riego, para los puentes, para la vialidad o para los proyectos de varios municipios, estos son procesos que ya llevan bastante tiempo y que no pueden detenerse porque afectarían las perspectivas de desarrollo regional, que están muy por encima de la “ambición o provecho” que a última hora pudieran sacarle los que, enquistados en las decisiones de un gobierno, pudieran estar pensando en “melar” de última hora. Queda menos de un mes para que asuma el Presidente Correa, y ojalá que para esa época todo, o la mayoría de lo que está pendiente para Manabí, en cuanto a entrega de recursos y avales, haya salido, pues de no ser así seguiremos perdiendo por cuanto los nuevos “gobernantes”, tanto nacionales como locales, con todo el “derecho de inventario” que les asiste, se tomaran bastante tiempo para inteligenciarse de lo actuado y por allí pudiéramos estar perdiendo, en tiempos y costos, lo que no sería bueno para nuestras aspiraciones. Alguien de Manabí tendrá contacto directo con el Presidente Correa, ojalá ese alguien sea lo suficientemente diligente para que le diga que una postergación más o un torpedeo adicional a nuestros proyectos puede ser un error grave con una provincia como ésta, que se cansa cada vez más por la dependencia y el centralismo.