El número de víctimas por las lluvias que castigaron la semana pasada la región serrana del estado brasileño de Río de Janeiro subió a 676.
En el séptimo día de trabajos de rescate, los socorristas aún buscan a al menos 208 desaparecidos. Las tareas de rescate están concentradas en áreas que, a casi una semana de la tragedia, aún permanecen aisladas tras haber sido bloqueadas por las toneladas de tierra, lodo y piedras. <