Infantes del Ejército mexicano sostuvieron este día un tiroteo con un grupo de sicarios que anteriormente habían asesinado a un agente policial que realizaba un patrullaje en su vehículo en uno de los barrios de Monterrey, capital del norteño estado de Nuevo León, indicó una fuente castrense.
Un militar que participó en el operativo explicó que un grupo de unos diez sicarios atacó con fusiles automáticos al policía Juan Martínez, y más tarde dispararon sus armas contra un helicóptero de Seguridad Pública que los seguía en el cerro La Campana, uno de los que rodean Monterrey.
Más tarde una patrulla militar realizó un operativo de búsqueda en las calles del cerro, una zona deprimida económicamente con población en extrema pobreza.
En ese sitio, los militares se enfrentaron a tiros con el grupo de sicarios que se había refugiado en una casa de seguridad, en donde murieron tres de los pistoleros, aunque al menos otros siete lograron escapar.
En esa casa los militares decomisaron chalecos blindados, tres fusiles de asalto AK-47 y varias granadas de fragmentación.
En 2010, más de 75 policías estatales y federales, así como un soldado, fueron asesinados por el crimen organizado en Nuevo León, y en los primeros 13 días de este año suman nueve las víctimas.
Por otro lado, en el puerto de Mazatlán, en el Pacífico mexicano, un grupo de sicarios asesinó a tiros a tres personas cuando viajaban en un vehículo en una de las principales avenidas.
Los pistoleros utilizaron fusiles AK-47 de los conocidos como "cuernos de chivo", informaron fuentes de la Fiscalía del estado de Sinaloa, al que pertenece Mazatlán.