Los habitante de la ciudadela Municipal están más desesperados que nunca por la insalubridad en la que viven.
Esto porque el canal que pasa por el lugar está lleno de aguas servidas, producto del obsoleto alcantarillado sanitario y que rebosa con más frecuencia debido a las lluvias que han caído.
Comenta el morador Belford Moreira que ya no sabe qué hacer, pues sus hijos están enfermos, el olor es insoportable y lo peor es que a su comedor no llega nadie por este motivo.
“Qué están haciendo las autoridades que no ven lo que estamos sufriendo desde hace años. Si tuviera como irme a vivir a otro lugar no lo dudaría, pero ya es hora de que nos atiendan”, agregó Moreira.
La habitante María Carrera también está moleta. Ella, con gritos dirigiéndose a este medio desde la puerta de su casa, comentaba que están viviendo como animales y que a nadie le interesa. “Gracias a Dios que ha dejado de llover sino esto fuera un río de aguas mal olientes que no respeta la salud de nadie”, dijo la señora, quien a su vez también hizo un enérgico llamado de atención a las autoridades municipales para que puedan solucionarles el problema que lleva más de cuatro años.
En esta ciudadela viven alrededor de 600 familias.<