Fausto Tamayo, comandante provincial de la policía, indicó que tras una denuncia reservada personal de inteligencia policial desplegó un operativo que permitió la incautación de los explosivos.
El allanamiento al domicilio que era utilizado como bodega se dio entre las calles América y San Rafael, se conoció.
Una persona fue detenida para investigaciones, dijo Tamayo, indicando que la tarde de ayer se efectuó la audiencia de formulación de cargos.
Entre el material decomisado hay los conocidos voladores, cajas de propulsores, cohetes, tortas cuadradas, caparazones, silvadores , caparazones, camarotes, entre otros los cuales estaban dentro de varias cajas que en total suman 200 unidades.
La mercadería incautada permanece en el comando provincial.
Se indicó que en las próximas horas el material pirotécnico será destruida.
Tamayo recordó que la venta de material explosivo esta prohibida, principalmente en esta época del año cuando la demanda aumenta.
Indicó que los controles continuarán, por lo que sugirió a los comerciantes se abstengan de negociar con este tipo de productos cuyo manejo puede generar consecuencias fatales como muertes, paralisis a las personas o incendios, como ha ocurrido en otras oportunidades.
El Cuerpo de Bomberos también ejecuta una campaña de prevención de este tipo de material.