Actualizado hace: 931 días 48 minutos
PORTOVIEJO
En un mes llegaría el cadáver

Catalina Troncoso no ha querido dar a las autoridades de Barcelona el nombre de su hijo Franklin Wladimir Chóez Troncoso, de 21 años, quien está entre las víctimas del accidente ferroviario ocurrido el jueves en la estación de Castelldefels, en España.

Domingo 27 Junio 2010 | 00:00


La razón de la negativa es porque no quería que en Ecuador su madre, abuela de Franklin, se enterara de que su nieto había muerto arrollado por un tren.

Esperan el cadáver
Sin embargo, los familiares del joven ya conocen la noticia y desde el viernes han levantado un altar con la foto del portovejense, en la que fue su casa, ubicada en avenida Guayaquil y calle 12 de Marzo.
Franklin Chóez era el segundo de tres hermanos. Sin embargo, hace dos años y medio, él y su hermano José Gabriel, de 17 años, fueron llevados por su madre a España, con el propósito de que se formen profesionalmente.
"Ahora que mi hermana se ha quedado sin su hijo, quiere regresar a Ecuador cuanto antes", señaló en una entrevista para El Diario y Manavisión, Lourdes Troncoso, tía del occiso.
La señora comentó que ayer, en horas de la mañana, su hermana se dirigía al Consulado de Ecuador donde mantendría con reunión con el cónsul Freddy Arellana.
"De lo que sabemos el cuerpo de mi sobrino sólo ha sido reconocido una parte, dependiendo de los trámites, su repatriación podría durar de 15 días a un mes", señaló la allegada, quien no pudo contener las lágrimas.

Doce muertos 
Esto mientras que en Barcelona los forenses que trabajan en la identificación de las víctimas del atropello ferroviario ocurrido en Castelldefels (cercana a Barcelona, noreste español) concluyeron ayer sus trabajos y fijaron en doce los muertos, once de ellos latinoamericanos y una joven de nacionalidad rumana. La consejera regional de Justicia de Cataluña, Monserrat Tura, informó ayer que ya se han identificado a las doce víctimas del siniestro, a la espera de constatar el ADN de una joven rumana de 30 años, para lo que se ha solicitado la ayuda de la Interpol y de las autoridades de Rumanía.
Los fallecidos, junto a muchos más jóvenes, se desplazaban desde la vecina Barcelona a las playas de Castelldefels para participar en una fiesta latina en el marco de la noche de San Juan.
Según las primeras investigaciones, las víctimas fueron arrolladas cuando descendían de un tren de cercanías para acudir a la  playa.
 

Compartir en Facebook
Compartir en Twitter
  • ¿Qué te pareció la noticia?
  • Buena
  • Regular
  • Mala

Más noticias