“…Luego de cinco años de gestión, he creado los más de cien mil empleos que ofrecí y juré cumplir en mi primera campaña del 2004. No fue mentira ni truco electoral. Cien mil empleos, cien mil familias pueden certificar que les digo la verdad. En consecuencia nuestro nivel de desarrollo económico es así de alto. Perdón por no haber hecho más. He construido los puentes y caminos que ofrecí y juré hacer. Se me viene a la memoria, como ejemplo, el puente que une a Crucita y San Jacinto, todos ustedes lo han disfrutado al igual que la vía que nos lleva a esa maravillosa obra con la que me comprometí al cerrar mi campaña del 2004.

El Anillo vial de El Florón  de Portoviejo,  es  una pequeña muestra de mi amor por la capital; he ordenando quitar ese cerco virtual que constituyen esas casetas de peaje que avergüenzan a tan noble pueblo y que es una muestra de inequidad.  Como ustedes saben y palpan, la autopista del valle que constituía la primera parte del paso lateral de Portoviejo, ya no tiene un solo hueco, es una verdadera alfombra de asfalto, con señalización e iluminación de primera; no solo eso, concluí los tramos faltantes,  tal como lo ofrecí en la campaña del 2004 y por lo cual Portoviejo me dio sus votos. Como ven, no sirvo para mentir ni engañar. El puente Papagayo es una obra de ingeniería a  toda prueba, igual que sus accesos que no se hunden, para nada, y que con diligencia he atendido. La Universidad San Gregorio de Portoviejo también puede dar fe que en estos poquitos cinco años, les construí y funciona de maravillas el conservatorio de música. En todos los cantones de Manabí  hay felicidad por el accionar de mi administración; y en todos hay bienestar. Agradezco que quieran poner mi nombre en sus  ya asfaltadas vía rurales, obras que  también ofrecí en  campaña. Las vías rurales  asfaltadas que constituyen circuitos viales de Chone, Bolívar, Junín, Santa Ana, 24 de Mayo, Jipijapa son solo una pálida muestra de mi eficiencia y eficacia.
Lideré la defensa de las rentas de todos los cantones, ello significa defender la asignación que el estado da a cada habitante de Manabí y que debe ser, si no mayor, tampoco menor al de cualquier otro habitante del Ecuador. Yo aplico aquello de que ¡con Manabí no se juega carajo! Miren cómo están de bien las vías de primer orden, como la que une a Portoviejo con Crucita. Eso refleja mi gestión exitosa. En el gobierno saben que a mí no me  amenazan  ni chantajean. No tengo miedo. No hay negocios que proteger ni contratos con el estado con los cuales me puedan condicionar. No he permitido que mis asesores me manejen ni manejen el gobierno provincial, Bachita lo sabe, menos que pretendan duplicar o triplicar la tasa de rodaje que se paga a la entidad que dirijo, por injusta, inconsulta y tramposa …” 
Qué iluso,  no.  Los negocios son primero, no Manabí. A seguir soñando.