Este cuadro conocido también como “ El bebedor de absenta ” que pertenece al período azul de Picasso y data de 1903, tenía una estimación previa de entre 30 y 40 millones de libras (44-58 millones de dólares, 33-45 millones de euros) .
Las ganancias de esta venta se destinarán a las obras de la fundación del compositor británico Andrew Lloyd Weber, que lo adquirió en una subasta por 29,2 millones de dólares en 1995.
La fundación ya trató de venderlo en una subasta en Christie's Nueva York en 2006, pero tuvo que retirarlo después de que un heredero del banquero berlinés judío Paul von Mendelssohn Bartholdy denunció que los nazis forzaron a su antepasado a deshacerse del cuadro en 1934.
El precio alcanzado por el “Retrato de Ángel Fernández de Soto” se quedó muy lejos del récord mundial para una subasta establecido en mayo por otra obra del pintor malagueño, “Desnudo, hojas verdes y busto”  (1932) , con 106,4 millones de dólares.
La otra joya de esta subasta de arte moderno e impresionista, unas “Ninfeas”  (1906) de gran tamaño de Claude Monet (1840-1926), se quedaron sin comprador al no alcanzar la estimación mínima fijada en 30 millones de libras.
“No encontró un comprador”, se limitó a decir una portavoz de la casa Christie's sin dar más precisiones.
El lienzo había sido presentado en la histórica exposición de la serie nenúfares de Monet en París en 1909.
En 2008, la casa Christie's había vendido otro óleo de nenúfares ejecutado por Monet en el jardín de su casa de la localidad francesa de Giverny, cerca de París, por 41 millones de libras (67,2 millones de dólares), el récord actual para el artista.
Christie's ponía bajo el martillo en esta histórica velada un total de 63 obras modernas e impresionistas estimadas en entre 163 y 231 millones de libras (242-342 millones de dólares).