Según denunció la Iranian Railroad for Queer Refugees (IRQR), una organización que auxilia a refugiados gays iraníes, tres personas corren el riesgo de sumarse a los ahorcados en Irán por su sexualidad y otra fue asesinada a golpes durante su detención. El representante de la IRQR en Sari, capital de la provincia de Mazandaran, relató el caso de Reza y Alireza, dos jóvenes de 23 y 28 años que podrían ser sentenciados a la pena capital por homosexuales.  Vivían juntos en un pequeño apartamento. Alireza trabajaba en la oficina de bienes raíces de su padre mientras Reza se quedaba en casa, para no despertar comentarios homofóbicos de los vecinos por su comportamiento más "femenino". Ninguno de los hombres de ambas familias aceptaba la inclinación sexual de la pareja ni su decisión de vivir juntos. El 27 de mayo, las fuerzas de seguridad iraníes irrumpieron en el apartamento y arrestaron a ambos. Les confiscaron una computadora y sus objetos personales, y detuvieron además a algunos amigos que estaban de visita. Los huéspedes fueron liberados luego de declarar por la fuerza que Reza y Alireza vivían juntos como pareja. Revelaron que, durante su detención, oyeron rumores de que la policía había actuado por pedido de las familias.