El pasado 31 de diciembre, el ministro de Relaciones Laborales, Richard Espinosa, anunció que el salario mínimo unificado que regirá desde este mes en Ecuador será de 240 dólares, 22 dólares más que el actual pero menor a los 320 dólares que exigían las centrales sindicales.
"Existe un descontento general a nivel nacional sobre este incremento salarial", dijo González en la televisión local Teleamazonas, al asegurar que los trabajadores creían que el Gobierno iba a cumplir con el señalamiento en la Constitución sobre la necesidad de tener un "salario digno".
El dirigente del FUT anotó que suponían que "una buena propuesta" para tener ese "salario digno" era partir de los 320 dólares.
Apuntó que los dirigentes de los trabajadores adscritos a sindicatos se reunirán en los próximos días para determinar acciones de protesta.
En principio, subrayó habrá una "gran movilización" para el 15 de enero a nivel nacional.
El ministro de Relaciones Laborales precisó la semana pasada que para establecer el alza salarial se tuvo en cuenta la inflación proyectada para el periodo, de alrededor del 4%, así como las estimaciones para el índice de productividad y el Producto Interior Bruto y No Petrolero.
Además, señaló que el Gobierno buscará llegar progresivamente hasta un salario mínimo de 320 dólares, cifra que reclaman los sindicatos como "salario digno" por considerar que, de ese modo, las familias podrían cubrir parte de la canasta básica de productos, que se calcula en unos 522 dólares al mes